La Subsecretaría de Ingresos Públicos pondrá en marcha un plan integral de fiscalización que comprenderá al conjunto de los tributos provinciales y comenzará a implementarse a partir del 2 de agosto en las zonas comerciales de las principales ciudades de la provincia.
La iniciativa se enmarca en la decisión del gobierno de “ecorrer el territorio para combatir la evasión y la elusión de impuestos según explicó ayer el secretario de Hacienda, Carlos Fernández, quien encabezó una conferencia de prensa realizada en la ciudad de Santa Fe junto al subsecretario de Ingresos Públicos, Sergio Beccari.
“Se trata de un conjunto de acciones que complementan el Plan de Regularización Tributaria” instrumentado a principio de año, que luego se extenderá a toda la provincia, añadió Fernández.
El encuentro con los medios de comunicación tuvo lugar en las dependencias del Ministerio de Economía en el Centro Cívico, y también participaron el titular de la Administración Provincial de Impuestos (API), José Raffin; y de las regionales Santa Fe y Rosario de la API, Gabriel Rosti y Marcela Vielba, respectivamente.
“El origen de este plan tiene que ver con las inconsistencias que detectamos entre los datos que tiene la Administración Provincial de Impuestos (API) y los que aportan los contribuyentes”, indicó Beccari.
En el marco de esta iniciativa, se llevarán a cabo en una primera etapa “operativos rastrillo” a los fines de “actualizar los datos de los contribuyentes del impuesto sobre los Ingresos Brutos, tanto a nivel local como a través de de convenios multilaterales, y también verificar el pago del impuesto Inmobiliario”, detalló el funcionario.
En cuanto a las características de un “operativo rastrillo”, Beccari explicó que tiene que ver “con la rapidez con que se accede a la información; son datos que están disponibles en los comercios y para los que no se necesita la asistencia de un profesional”.
Para la puesta en marcha de esta primera etapa estarán afectadas en forma directa alrededor de 100 agentes de la API, que van a estar en la calle y en las áreas de fiscalización interna, selección y control.
El plan de fiscalización fue elaborado con la participación de funcionarios de la API, mientras que su instrumentación se hará en forma coordinada con instituciones intermedias y organizaciones de profesionales. Tal es el caso de los colegios profesionales de contadores y abogados y de entidades representativas del comercio y la industria, que fueron interiorizados respecto de los operativos a desarrollar y comprometieron su colaboración.
La iniciativa se enmarca en la decisión del gobierno de “ecorrer el territorio para combatir la evasión y la elusión de impuestos según explicó ayer el secretario de Hacienda, Carlos Fernández, quien encabezó una conferencia de prensa realizada en la ciudad de Santa Fe junto al subsecretario de Ingresos Públicos, Sergio Beccari.
“Se trata de un conjunto de acciones que complementan el Plan de Regularización Tributaria” instrumentado a principio de año, que luego se extenderá a toda la provincia, añadió Fernández.
El encuentro con los medios de comunicación tuvo lugar en las dependencias del Ministerio de Economía en el Centro Cívico, y también participaron el titular de la Administración Provincial de Impuestos (API), José Raffin; y de las regionales Santa Fe y Rosario de la API, Gabriel Rosti y Marcela Vielba, respectivamente.
“El origen de este plan tiene que ver con las inconsistencias que detectamos entre los datos que tiene la Administración Provincial de Impuestos (API) y los que aportan los contribuyentes”, indicó Beccari.
En el marco de esta iniciativa, se llevarán a cabo en una primera etapa “operativos rastrillo” a los fines de “actualizar los datos de los contribuyentes del impuesto sobre los Ingresos Brutos, tanto a nivel local como a través de de convenios multilaterales, y también verificar el pago del impuesto Inmobiliario”, detalló el funcionario.
En cuanto a las características de un “operativo rastrillo”, Beccari explicó que tiene que ver “con la rapidez con que se accede a la información; son datos que están disponibles en los comercios y para los que no se necesita la asistencia de un profesional”.
Para la puesta en marcha de esta primera etapa estarán afectadas en forma directa alrededor de 100 agentes de la API, que van a estar en la calle y en las áreas de fiscalización interna, selección y control.
El plan de fiscalización fue elaborado con la participación de funcionarios de la API, mientras que su instrumentación se hará en forma coordinada con instituciones intermedias y organizaciones de profesionales. Tal es el caso de los colegios profesionales de contadores y abogados y de entidades representativas del comercio y la industria, que fueron interiorizados respecto de los operativos a desarrollar y comprometieron su colaboración.
CPN. MONJO FERNANDO
Fuente: Prensa Santa Fe
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